Afecto

Mímelo mucho, álcelo las veces que le plazca, hágale sentir cuánto lo quiere. Las demostraciones de amor y de afecto le serán devueltas por su labrador de manera inconmensurable.
¡PERO OJO!!!! No fomente actitudes agresivas o temerosas por medio del afecto. Si su perro reacciona ante un ruido intenso ladrando, llorando o huyendo a esconderse, actúe indiferentemente, no lo estimule ni consuele. Si lo hace, no le ayudará y pensará que esto es lo correcto. Si tiene una reacción inadecuada como ladrido excesivo o gruñidos hacia un perro o persona extraña... No lo permita, corrija a su amigo. Esta es la mejor forma de demostrarle su afecto. Un perro equilibrado y capaz de vivir en manada y en sociedad, sin duda será un perro más feliz...